Fundada en Cordoba (Argentina) por Marcelo Nieva, esta banda marco un estilo musical y una generación de jóvenes cristianos. En la actualidad esa identidad que la caracterizo parece haber desaparecido. En un reportaje hecho para lavoz.com.ar el líder, además de explicar la visión de la banda, expreso que están “fuera del entorno cristiano” y que tienen un compromiso social. A continuación la entrevista.
PRIMERA PARTE
¿Qué motivó la voluntad de cambio?
Un par de cosas. Hay un modo de hacer la cosas en el mercado cristiano que no comparto. Qué sé yo, en nombre de Cristo no se venden discos sino que se ayuda a la gente. Pensar así hizo que me ganara muchísimos enemigos.
¿Seguís siendo cristiano?
-Soy cristiano hasta los huevos.
Entonces, las diferencias entre el ayer y el hoy de Roko sólo se manifiestan en la música.
-Sí, claro. Destrozo interior, el disco que tenemos grabado, habla de mi dolor personal y de cómo mi Dios me ayudó a salir adelante. Ese fue un sentimiento muy sincero y muy del corazón, que no buscaba un móvil para vender. Y ahora resulta que Roko se encuentra con un discurso más contestatario. Nos molestan y duelen más cosas.
No se bancaron la supuesta tiranía del mercado cristiano, ¿pero comulgan con todo lo que impone el secular?
-Estoy en el medio de los dos mercados. Mucha gente no nos quiere porque dice "mirá, los cristianos". Y los cristianos no nos quieren por rebeldes. Hay mil cosas que no nos gustan. Estuvimos muy cerca de Buenos Aires, de Por Art, de (Mario) Pergolini, pero se pinchó un contacto y nos volvimos sin habernos ido. En fin, renuncio a ser un artista cristiano convencional y también a ser un artista que se quiere ir a Buenos Aires. Pongo todo en laburar acá y armar un movimiento desde aquí.
La tribu. Nieva cuenta que, semanas atrás, Roko convocó a 600 personas, quienes se involucraron con el concepto "La tribu". "El proyecto Tribu Roko tiene que ver con que se habla demasiado y se hace poco. Quiero decir, antes de convertir a alguien, ayudalo. Si alguien tiene hambre y vos le hablás, no se la sacás, ¡Dale de comer primero y no le digás andá y orá! Eso queremos transmitírselo a la gente. Es arte más compromiso social, pero sin verso.
Es decir que ustedes conviven con los "fans".
-Si no convivís con la gente, no ayudás a nadie. Me aconsejan tener una actitud de estrella y apartarse de quienes te ven en el escenario. Los escucho, pero no estoy de acuerdo con esa postura. Nuestros fans también posaron para las fotos.
SEGUNDA PARTE
Respecto a su nuevo proyecto explican:
Contáme, ¿qué van a presentar el sábado 3 noviembre?
Vamos a hacer un show que se llama “La Lucha de los Despojados”. La idea es levantar la bandera de esa gente que lucha aunque tiene todo en contra. Yo estoy rodeado de mucha gente que es parte de la minoría y con la banda siempre traté de darle bola a los “nadie” que por ahí quedan afuera de toda una historia. “La Lucha de los Despojados” también tiene que ver con las elecciones pasadas del 2 de septiembre, por esa sensación que nos quedó a todos de que nos “chorearon” y que desde hace rato nos han despojado de todo. No se trata de dejar un mensaje resentido, sino de pensar. La idea es siempre crear conciencia.
De repente me encuento con un discurso más político-social. Tenía entendido que los comienzos de “ROKO” fueron dentro de la música cristiana...
ROKO nace en el circuito de la música cristiana. Siempre tuvimos la necesidad de acercarnos a la gente, no con una idea evangelizadora, sino con la idea de estar con ellos. Nosotros empezamos a tocar y nos empezó a ir bien, empezamos a tocar con bandas cristianas que llevan mucha gente, yo desconocía donde nos metíamos. Es todo un entorno que ustedes no se imaginan, que puede llegar a mover más gente y más guita de la que ustedes pueden imaginarse. Me acuerdo que estábamos con un líder de una de las bandas más importantes del medio y un chico con la cara quemada se acerca a pedirle un autógrafo. El cantante lo miró como con asco, le firmó el autógrafo y no le dijo ni hola… y con ese “divismo del orto”, diciendo que sos cristiano, está todo mal. Porque si vos lees la Biblia Cristo estaba entre la gente, con los que nadie quería, no era una vedette del cristianismo. A todo esto el tipo hablando del business con una cancha... teniendo tan claro lo que hay que hacer para ganar guita y tan lejos de la gente... eso me dolió en el alma, me rompió las pelotas tanto... Entonces yo entro en una crisis. Dije “no quiero saber nada con las bandas cristianas, porque no tengo nada que ver”. Si vos venís a mi en nombre de Cristo, mostráme que ayudas a alguien.
¿Y cómo se manifestó esa crisis?
Nosotros empezamos a viajar por todos lados, firmamos contrato con una de las discográficas cristianas más importantes, donde vos tenés la agenda lista, viajas, cobrás y listo. Nos agarró Pergolini, sonamos en la Rock&Pop, íbamos a firmar con el manager de Rata Blanca, hasta que yo rompo toda relación. Nos quedamos, días antes de firmar, sin nada, desvinculándonos de una plataforma hipócrita. Yo seré un gilazo, pero tengo convicciones y renuncié a lo que nos ofrecían por quedarme acá sin nada y empezar a crear un movimiento, creo tanto en la autogestión, en lo independiente, lo amo, porque es tuyo y vale mucho más. Hay tanto atorrante hablando de Dios. A nosotros nos relacionaban con bandas cristianas y yo necesité despegarme de ese circuito porque en nombre de Cristo no se monta una estructura de venta, sinó que se ayuda al que está solo.
Y al cambiar de posición, ¿cómo respondió el público?
ROKO es una banda polémica, como creo que no hay otra. Toda la vida tuve a los cristianos en contra porque me rapo la cabeza y me dejo el pelo largo atrás, porque toco en lugares no convencionales para cristianos. Somos re criticados por ser los “endemoniados” del cristianismo y, a la vez, tenemos el quilombo de que están los no cristianos que no nos conocen y que, por falta de información, creen que yo voy a “pelar” la Biblia y orar. Estuve en el medio de las dos aguas y se nos hizo re duro porque no nos querían ni los cristianos ni los no cristianos y yo decía ¿a quién le canto?. Ahora tenemos mucho público que no es cristiano y mucho público de amigos cristianos que nos sigue, que tiene la cabeza abierta y nos apoya, pero vivímos la apatía de la gente. Nosotros tocamos en el “Poli-deportivo General Paz” en el 2004 para 3500 personas, porque esa cantidad de gente mueve la Iglesia (aclara nuevamente), pero cuando yo empiezo con esta idea y empiezo a meter músicos no cristianos, se empieza a generar una polémica. Al año de que se cayó todo en Buenos Aires digo “hagámonos fuertes en Córdoba” e hicimos un show y metimos 200 personas… pasamos de 3500 a 200... Sin embargo eso no nos calentó.
Ustedes tienen una agupación, “la tribu ROKO”, contame de eso..
Es un poquito esto de estar más cerca de la gente. Yo soy un enamorado de la gente, de mi Córdoba. Me importa un carajo ese exitismo, ese afán con lo de Buenos Aires. Yo amo mi gente y quiero estar en contacto con ellos, entonces la tribu es una forma de infiltrarnos y estar con ellos. y ponermos al lado de alguien que por ahí está mal. Uno no es salvador de nadie, pero te podés poner al lado de tanta gente y empezar a darle ánimo, decirle “vamos loco que se puede”. Yo creo mucho en el liderazgo y en la influencia, yo creo que si te pones al lado de alguien y tenés ganas de ayudarlo, lo vas a ayudar. Yo creo que todo pasa, hasta “si la pegaste”... todo pasa, así es la vida de difícil. En “la Tribu ROKO” tenemos varias actividades, hacemos arte callejero, tenemos charlas de política, de lo que sea. Es un espacio donde vos te sentís libre de tantas cosas. Yo creo en la libertad, defiendo la libertad.